
El mito griego
Se narra que la fuente estaba dedicada a la ninfa Aretusa. Según el mito, Alfeo, hijo del dios Océano, sentía un amor no correspondido por la ninfa. Cansada de sus constantes atenciones, Aretusa pidió ayuda a Artemisa, quien la envolvió en una densa nube y la transformó en una fuente en la costa de Ortigia. Zeus, para ayudar a Alfeo, desconsolado, a acercarse de nuevo a su amada, lo transformó en el río que brota en el puerto de Siracusa.
La historia de la fuente
Conocida como "a funtana re papiri" según la tradición local, la Fuente de Aretusa en Siracusa fue restaurada muchas veces a lo largo de los siglos. La última modificación data de 1540, cuando los españoles redujeron el lago en unos 200 metros para construir los muros que rodeaban la isla de Ortigia. Esos muros fueron derribados en 1847, y en los cimientos de los muros se construyó el actual Belvedere.
Curiosidades sobre la Fuente de Aretusa
Dentro de la fuente de Aretusa se encuentra una de las únicas dos plantas de papiro salvaje que existen en Europa, con miles de años de antigüedad. El agua es bastante baja y se pueden ver numerosos peces de agua dulce. La fuente también está habitada por patos domésticos. Se puede admirar la fuente tanto desde el Belvedere, observándola desde arriba, como desde el Acuario.





